NUESTRA MADRE LIBRADITA
VIDA Y OBRA
VIDA Y OBRA
Nacimiento
La sierva de
Dios, María Librada Orozco Santa Cruz, nace
el 20 de Julio de 1834, en Arandas, Jalisco.
Sus
padres don Juan Orozco y doña Teresa Santa Cruz de Orozco, conformaban, junto
con sus hijos, una familia sumamente devota .
Familia
María
Libradita, la menor de su familia tenía siete hermanos, Melquiades, Victoriano,
Isidro, Miguel, Matiana, Perfecta, y María, quienes siempre habrían de
protegerla y cuidarla.
Bautismo
Al siguiente
día de su nacimiento, fue bautizada en la Parroquia de Santa María de
Guadalupe.
Niñez
Desde
su niñez, Libradita mostró rasgos muy especiales de respuestas incondicionales
a la gracia de Dios.
Su
padre era un señor acaudalado, por lo que decidió mudarse a un lugar donde sus
hijos pudieran educarse mejor. Zapopan, Jalisco, fue la ciudad elegida.
Primera Comunión
Muy especial
debió ser la primera comunión para Libradita, quien habría de prepararse con
sumo cuidado para realizar ese acto tan sublime.
Adolescencia
A los 14
años, Libradita ingreso al Centro Educativo conocido popularmente como el
Beaterio.
Los padres de
Libradita le dieron soporte en todo ya fuera en cuestiones del alma o en la de
tipo material, pero también contó con la dirección espiritual del M. R. P.
Comisario general, Fray Teófilo García Sancho, O. F. M.
Inicia su Vida Apostólica
En el año de
1851, su deseo de consagrarse a Dios le llevo a ingresar al convento de las
dominicas de Jesús María en Guadalajara.
La persecución
religiosa que se dio en eso años cerró todos los monasterios del país, por lo
que Libradita tuvo que regresar a su hogar.
Estando en su
casa, Libradita se dedico a las labores hogareñas y de caridad, y pidió permiso
al Fray Teófilo para poder usar la túnica interior de las madres capuchinas.
Antes de
hacer cualquier cosa, Libradita tuvo dos sueños reveladores en relación con la
fundación de la Congregación, y el carisma de la Sierva de Dios.
Primer Sueño
Soñé que íbamos a ver la casa no de la que Susana
me había contado” en ese entonces se llamaba “capilla vieja” actualmente templo
del refugio, y esta sobre la ay. Federalismo, cruzando con Angulo.
No iba
sola, 2 señoritas me acompañaban. Cuando entramos, vi un cuadro que
representaba al niño Dios, de tamaño natural, me acerque y vi que tenía su
cuerpecito encadenado.
Al acercarme más, el niñito tomo en
sus manos la cadena y me las puso a mi”. ”Continuamos recorriendo la casa. En
otra habitación vi la imagen del divino preso, de Diana talla”. “Igualmente una
de nuestras señoras de los dolores ambas imágenes muy hermosas, pero
deterioradas”.
“En
eso, un señor toma las manos de una de la señoritas que me acompañaban y la
saco a la calle. Mi otra compañera y yo, fuimos entonces a la capilla que
estaba completamente en ruinas, y vi en un lado, muchas personas vestidas de
café. En el otro lado, muchas niñas vestidas de azul marino, y en otro lado,
muchas personas vestidas indistintamente”.
Segundo Sueño
“El segundo
sueño viene a ser completo del primero: fui con el padre García Sancho a la
Basílica de Zapopan. Levante la mirada y vi un religioso, de quien el reverendo
padre Sancho me dijo: mira ese es el padre que te va a ayudar. Posteriormente
Libradita y Susana acudieron una vez más con el padre García Sancho”.
“Vayan con el padre Avelar. Díganle
que las envió yo, y que vea que puede hacer por ustedes”.
Primera Obra
Fueron
numerosos los trámites legales que se siguieron de la casona, hasta que el
viernes 1 de abril de 1889, toman posesión de la misma, iniciando todas las
labores de reconstrucción. Mucho fue el trabajo que esta iniciativa implico. Se
contrataron ingenieros, arquitectos, etc., pero incluso las admirables damas
trabajaron personalmente en la construcción, Libradita misma dio la orden para
iniciar el trabajo, el 1 de mayo de ese mismo año.
Muerte
A la 1:10 de
la madrugada del día 20 de Marzo de, 1926, su alma confortada con los auxilios
divinos, voló al cielo. El día 22 fue su misa de exequias en el Templo del
Refugio estando su cuerpo presente. El día 31 de Mayo de 1969, con licencia del
excelentísimo y reverentísimo se trasladaron sus restos al templo de nuestra
señora del refugio, en Guadalajara, los
cuales yacen al lado derecho del altar.
Virtudes Heroicas
Fe Heroica
La fe era su norma de vida sobrenatural, base de su actitud
interior y exterior. Inspirada por Dios, manifestó varias veces su proyecto de
fundar una Congregación Religiosa, pero su confesor y director espiritual Fray
Teófilo García Sancho OFM, durante muchos años no la autorizó. Ella, sin
embargo, esperaba y aceptaba con fe admirable la voluntad del Señor. Siempre
vio en la voluntad de sus superiores la voluntad de Dios.
Esperanza Heroica
Su oración, que practicó desde su juventud, la llevó a una
experiencia profundamente contemplativa, mantuvo constantemente la presencia de
Dios y la motivó a realizar frecuentes actos de esperanza heroica. Estaba
segura de que el Señor es fiel a sus promesas.
Caridad Heroica
El amor a Dios y al prójimo fue el centro y móvil de toda la
vida de María Librada, tanto en las acciones pequeñas como en las grandes
obras. Difícilmente en el curso del día perdía de vista a su amantísimo Esposo
celestial. Aprovechaba cada ocasión, aún de noche, para elevar a Dios su
apasionado himno de amor.
